Lectura en voz alta, es una excelente oportunidad para ser modelo de lectura propiciando el aprendizaje a través de la imitación.
Es conocido que una de las formas más eficaces para el aprendizaje es la imitación. Por ello, cuando hablamos del aprendizaje de la lectura, es muy importante que los adultos que rodeamos a los niños, seamos (o nos veamos) lectores.
Un alto valor instruccional
Una estrategia que es usada tradicionalmente es la lectura en voz alta de diferentes textos, por lo general, antes de la hora de dormir. Esta estrategia tiene un alto valor instruccional, ya sea para el desarrollo del gusto por leer y para el desarrollo de la comprensión de lectura.
Según Swartz (2010) “La lectura en voz alta es aquella técnica en que el maestro (adulto) lee a los niños para compartir con ellos el placer de leer, actuando así como un modelo que aprecia la lectura y la disfruta. […] De este modo, los alumnos (niños) no sólo aprenden de los libros, sino que gozan del acto de leer”.
De esto se desprende, el primer gran aporte de establecer la lectura en voz alta como una rutina: el gusto por leer.
Enseguida, les comentaremos algunos elementos importantes de considerar al momento de realizar una lectura en voz alta.
Tres elementos base
Para que esto se logre, Swartz (2010) propone tres elementos para considerar durante la lectura en voz alta en la sala de clases que también se pueden aplicar en los hogares:
- La selección de los textos. Los textos que se lean deben ser variados, acorde a los intereses de los niños y comprensibles para ellos. En otra entrada del blog profundizaremos en esta cuestión.
- Invitar a involucrarse y participar de la lectura. Durante la lectura, el adulto puede realizar preguntas que verifiquen comprensión, puede agregar elementos que ayuden a clarificar aspectos de la lectura y puede hacer que el infante interactúe con el texto a través de describir las ilustraciones o completar parte del texto.
- Organizar el ambiente de lectura. Es importante leer en un espacio cómodo como la cama, sillones o en una alfombra. También, se debe establecer proximidad entre el que leer y los que escuchan e intentar que no hayan elementos distractores como: televisión o ruidos fuertes.
Además de los elementos anteriores, hay otros que son importantes de considerar:
- Establecerla como una rutina. Si la lectura se establece como un momento diario en donde hay un encuentro entre el adulto, el niño y el niño, se podrá establecer un vínculo afectivo con la lectura.
- Realizar una lectura fluida. Para lograr que la lectura sea placentera es importante que se lea de forma fluida. Esto quiere decir que sea una lectura que tiene una velocidad adecuada (ni muy rápida ni muy lenta), es precisa y expresiva.
Lograr una lectura fluida
Para que el adulto guía pueda lograr ser exitoso con una lectura fluida, es importante que conozca muy bien el texto y pueda practicar cómo lo realizará en voz alta. De esta forma, se evitarán errores de precisión como omitir, agregar o sustituir palabras o sílabas y se promoverá una lectura expresiva que ayude a la comprensión del texto y a la conexión emocional con él.
La compañera, maestra Karla Santiago nos regaló un artículo muy instructivo con algunos consejos que se pueden seguir en casa para ayudar a la lectura en voz alta. “Practicas para hacer el leer divertido”
Ayuda a la comprensión de lectura
Además del acercamiento afectivo con la lectura, la lectura en voz alta tiene un potencial instruccional alto. Con esta estrategia se desarrollan otras habilidades vinculadas con la comprensión de lectura que no se relacionan con el aprendizaje de las letras.
Uno de los grandes problemas en América Latina son los bajos niveles de comprensión de lectura, ya que la escuela durante los primeros cursos dedica grandes esfuerzos al aprendizaje de las letras, pero no al desarrollo de esta habilidad más compleja. Es como si solo se pudiera enseñar a comprender después de enseñar a decodificar. Sin embargo, estos aprendizajes pueden ir de forma paralela a través del desarrollo de la comprensión oral.
Cuando los niños/as escuchan y conversan de los textos que les leen aprenderán vocabulario, estructuras sintácticas más complejas, nuevas estructuras textuales y géneros discursivos, conocimiento de mundo y conocimiento de lo impreso.
La lectura en voz alta también favorece el desarrollo de la comprensión oral, lo que repercutirá en la habilidad de comprensión lectora.
Profesora general básica con mención en
Lenguaje y Comunicación, Diplomada en fomento lector infantil y juvenil
0 comentarios